En la Cuba actual hay miles de cosas que no tienen una explicación racional. Cosas, que aunque fueras poseedor de un coeficiente intelectual de 230 puntos no las podrías entender. Cosas, que si no eres fuerte mentalmente te hacen rozar la locura.
Vivimos a diario envueltos en situaciones que si se las contaras a cualquier habitante de otras partes del mundo te mirarían con cara de incredulidad…
Cómo crees que reaccionaría un inglés, un canadiense o un chileno si les dices que con el salario de un médico en Cuba no se puede comprar un machacador de ajos?
Cómo crees que reaccionaría si les dices que un domador en un Circo cobra más que un médico que empieza a trabajar ya titulado?
O que un torcedor de tabacos con un 9no grado cobra muchísimo más que un galeno con dos especialidades, o más increíble, que el director de un hospital. Imagina si le dices que con la moneda que cobran no puede comprar en las únicas tiendas que venden lo necesario para vivir.
Muchos creían que con la última reforma salarial la pirámide se enderezaría. Que con la “ Tarea Ordenamiento” y las explicaciones de los eruditos en el tema “economía cubana” verían subir el poder adquisitivo de sus salarios, muchos creían que mejorarían su calidad de vida…
El médico hoy no se puede comprar el machacador de ajos… Pero lo que más me preocupa de mi amado país, por el que lo hemos dado todo, es :
¿ Qué se podría comprar ese mismo galeno si se jubilara mañana?
Gracias a todos por estar ahí cuando llegamos al mundo, por curar nuestras heridas, por quitarnos un desesperante dolor de muelas, gracias por arrebatarnos de la muerte.
Posteado en mi perfil de Facebook el (24/05/2022)